EL DOLOR DE ESPALDA
¿Qué es La lumbagia o Dolor de espalda?
La Lumbalgia Inespecífica (Dolor de Espalda Baja) se define como el dolor localizado entre el límite inferior de las costillas y el límite inferior de las nalgas, cuya intensidad varía en función de las posturas y la actividad física, suele acompañarse de limitación dolorosa del movimiento y puede asociarse a dolor referido o irradiado (Irradiado a las piernas habitualmente). El diagnóstico de lumbalgia inespecífica implica que el dolor no se debe a fracturas, traumatismos ni enfermedades sistémicas.
¿Cómo se manifiesta?
Se puede presentar como un dolor agudo (duración de menos de 6 semanas) o Dolor Crónico (mayor de dos meses de duración) en la región inferior de la espalda conocida como Región Lumbar. Este puede permaneser solo en la región lumbar o puede irradiarse a la región superior de la espalda (región dorsal) o hacia las piernas. Generalmente aumenta al caminar o al estar sentado y no suele acompañarse con otra sintomatología, pero en ocasiones puede presenta adormecimiento en las piernas y debilidad los cuales evidencia un problema mayor.
¿Con que suele relacionarse?
El lumbago puede estar influenciado por un descanso nocturno deficiente o de mala calidad, fatiga, falta de entrenamiento físico o problemas y conflictos psicosociales. Estos factores alteran la percepción y conducta del paciente dependiendo del grado de disfunción, incapacidad y respuesta al tratamiento.
El dolor en la zona baja de la espalda es multifactorial y puede estar relacionado con problemas ligamentosos (esguince) o musculares (distensión) agudos, que tienden a ser autolimitados, o a procesos crónicos fibromusculares, artrósicos o del tipo de la espondilitis anquilopoyética en la región lumbosacra. La prevalencia de dolor en esta zona aumenta con la edad, alcanzando el 50% en personas mayores de 60 años.
¿Cómo se diagnostica?
El lumbago agudo y autolimitado suele aparecer en personas sin antecedentes de malestar crónico y se relaciona habitualmente con sucesos o incidentes previos (p. ej., sobresfuerzo, distensión, traumatismo, tensión psicológica). Estos episodios no suelen requerir pruebas diagnósticas, excepto un buen interrogatorio por parte de un médico con experiencia en su manejo (P. ej., Fisiatras y Neurocirujanos) y una exploración clínica detallada. En algunas ocasiones pruebas de imágenes (rayos X, resonancia magnética) y de electrofisiología suelen indicarse cuando se sospechan causas mayores.
¿Cuál es su tratamiento?
La Mayoría de los dolores de espalda pueden ser manejados con tratamiento conservador (no quirúrgicos), y un diagnóstico y tratamiento oportuno pueden prevenir complicaciones que solo pueden ser reparadas solo con cirugía.
El tratamiento conservador está encaminado a una Rehabilitación integral (Terapia Física, Higiene de Columna, Manejo Farmacológico Especifico).
Un Diagnóstico temprano, un Tratamiento Integral y Adecuadas Recomendaciones logran un buen control del dolor de Espalda y evita Complicaciones